Colombia: Desaparición de Valeria Afanador, denuncian responsabilidad del colegio en Cajicá
La desaparición de Valeria Afanador en Cajicá cumple más de 13 días sin respuesta. Familia y abogado denuncian al colegio por negligencia y posible alteración de la escena.
La desaparición de Valeria Afanador, una niña de 10 años en Cajicá (Cundinamarca), ha conmocionado al país y generado serias dudas sobre la responsabilidad del colegio Gimnasio Campestre Los Laureles en el que estudiaba. Han pasado más de 13 días desde que la menor fue vista por última vez dentro de la institución educativa, pero hasta el momento no hay un rastro claro de su paradero.
La familia, representada por el abogado penalista Julián Quintana, asegura que la institución falló en su deber de proteger a la menor y denuncia graves inconsistencias en la forma como se ha manejado la investigación.
Señalamientos al colegio por negligencia
El jurista explicó que las directivas y empleados del plantel debían asumir una “posición de garante” sobre la seguridad de Valeria Afanador, ya que la menor desapareció dentro de las instalaciones sin que nadie diera explicación. Según Quintana, esto podría derivar en responsabilidades no solo administrativas, sino también penales.
Lo más preocupante, afirma, es que mientras la búsqueda continúa, el colegio decidió retomar clases “como si nada hubiera pasado”. “Esto demuestra una indolencia inaceptable. Pusieron una reja más fuerte y creen que con eso resolvieron el problema, pero la vida de Valeria sigue en riesgo”, cuestionó el abogado.
La familia sostiene que la desaparición de Valeria Afanador no fue un hecho accidental. Quintana explicó que, tras varios recorridos por la zona boscosa cercana al colegio, no se encontró ningún indicio físico que permitiera inferir que la niña salió por sus propios medios.
“Si hubiera escapado sola, habría rastros como ropa rasgada, cabello o huellas. Nada de eso apareció. Todo indica que se trató de algo planeado y ejecutado de manera impecable”, señaló el abogado, quien añadió que pedirán a la Fiscalía profundizar en esta hipótesis.
Incluso denunció que la escena habría sido alterada por el colegio. Según su testimonio, los huecos y fallas de seguridad en las rejas del colegio fueron reparados poco después de la desaparición, lo que impidió realizar una reconstrucción fiel de los hechos.
Quintana recordó que, de confirmarse negligencia u omisión, los directivos podrían enfrentar consecuencias penales en el marco del artículo 25 del Código Penal colombiano, que obliga a quienes tienen responsabilidad sobre la vida de los menores a responder por su protección.
Búsqueda y avances de la investigación
La desaparición ha movilizado a la Policía, la Cruz Roja, bomberos y autoridades locales, que han rastreado el río Frío, que rodea el colegio y más de cinco municipios cercanos sin obtener resultados. Interpol emitió una alerta amarilla y el Gobierno ofreció una recompensa de 70 millones de pesos por información.
Pese a los esfuerzos, no se ha encontrado ningún rastro de Valeria. “No hay crimen perfecto, tiene que estar en alguna parte. Todo indica que fue sustraída de manera planificada”, reiteró Quintana.
La Fiscalía trabaja en análisis de cámaras, antenas de telefonía y entrevistas, mientras que investigadores privados contratados por la familia aportan información adicional para esclarecer el caso.
Finalmente, el abogado insistió en que la prioridad debe ser localizar a la menor, pero también garantizar que el colegio asuma sus responsabilidades. “No se puede normalizar que una niña desaparezca en un colegio y que las clases sigan como si nada”, concluyó.
Para comentar, debes estar registradoPor favor, inicia sesión