Oregón y San Francisco son unas de las ciudades más afectadas por los incendios que se suscitaron en Estados Unidos los últimos días
Estados Unidos se ha visto atacada por incendios que cubren gran parte de la superficie de California atizados por una sequía de casi 20 años.
Al norte, zonas de Oregón que habitualmente no se incendian desde el miércoles están en llamas.
Las grandes cantidades de humo y cenizas que se han producido en los incendios forestales han generado un efecto inesperado en el cielo de California y Oregón.
Las enormes columnas de humo por los incendios forestales que azotan el oeste de Estados Unidos.
Por ello, se tornaron los cielos de un color rojizo que asombró a muchos de los habitantes.
Ante este desastre natural, fue San Francisco, una de las ciudades más afectadas por la llegada de humo.
Los incendios que se han desatado en 28 puntos del estado.
Luego del incendio, al menos 14 mil personas trabajaban incansablemente para tratar de extinguir el fuego.
Este desastre ha consumido poco más de un millón de hectáreas en California.
Las partículas de humo “solo permiten que la luz amarilla-naranja-roja llegue a la superficie, haciendo que los cielos se vean anaranjados”, explicó el Distrito de Gestión de la Calidad del Aire del Área de la Bahía mediante su cuenta en Twitter.
Asimismo, las condiciones atmosféricas comenzaron desde el amanecer, lo cual hizo pensar a algunos residentes en San Francisco y sus alrededores que aún era de noche.
“Se siente como el fin del mundo”, dijo Catherine Geeslin, que vive en el área West Portal, al diario San Francisco Chronicle.
Los residentes también se ven afectados por una ola de calor.
La misma condición afectó al vecino estado de Oregón, donde algunas localidades como Seal Rock y Salem City también vieron cielos naranjas.