La NASA pierde contacto con la nave espacial MAVEN, la sonda que estudia Marte
La NASA investiga la pérdida de señal de la nave MAVEN en Marte, una sonda clave para estudiar la atmósfera marciana y la habitabilidad del planeta rojo.
:format(webp):quality(40)/https://impactovecdn.eleco.com.ar/media/2025/12/maven.png)
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) confirmó que dejó de recibir comunicaciones de la sonda Mars Atmosphere and Volatile EvolutioN, que desde hace más de una década orbita Marte y estudia su atmósfera superior. El incidente ocurrió tras un paso rutinario de la nave por detrás del planeta rojo, un momento crítico en el que las comunicaciones suelen interrumpirse brevemente, aunque esta vez la señal no regresó.
Según la agencia espacial estadounidense, la telemetría previa al evento indicaba que todos los sistemas de MAVEN funcionaban con normalidad. Sin embargo, una vez la nave reapareció desde la perspectiva de la Red de Espacio Profundo, no se detectó ninguna transmisión, lo que dio inicio a un protocolo de investigación técnica para determinar las causas de la anomalía.
Qué se sabe sobre la pérdida de señal de la nave MAVEN
Los equipos de ingeniería y operaciones trabajan de forma coordinada para restablecer el contacto. La NASA informó que se están realizando intentos periódicos de escucha y envío de comandos, con el objetivo de identificar cualquier respuesta de la sonda. Este tipo de maniobras forma parte de los procedimientos estándar ante eventos de pérdida de comunicación en misiones interplanetarias.
La pérdida de señal de la nave MAVEN preocupa especialmente por el papel estratégico que cumple dentro del programa marciano. Además de su misión científica principal, la sonda actúa como estación de retransmisión de datos para otros vehículos que operan en la superficie del planeta, como los rovers Curiosity y Perseverance.
Una misión clave para entender Marte
Lanzada en 2013 y en órbita desde 2014, MAVEN ha sido fundamental para comprender cómo Marte perdió gran parte de su atmósfera a lo largo de millones de años. Sus mediciones permitieron confirmar que la interacción con el viento solar fue decisiva en la transformación del planeta, que pasó de ser un mundo potencialmente habitable a uno frío y árido.
Los datos recopilados por la sonda han aportado información crucial sobre la historia climática marciana, la presencia pasada de agua líquida y las condiciones necesarias para la vida. Por ello, cualquier afectación prolongada a la misión tendría impacto directo en el conocimiento científico acumulado sobre el planeta rojo.
La NASA no ha declarado aún la pérdida total de la nave y mantiene abiertas todas las posibilidades técnicas. Experiencias anteriores demuestran que algunas sondas han logrado restablecer comunicaciones tras periodos prolongados de silencio. Mientras tanto, la agencia aseguró que compartirá información oficial a medida que avance la investigación.
Para comentar, debes estar registradoPor favor, inicia sesión