Rubén González, secretario general del sindicato de Ferrominera del Orinico, estaba detenido desde el 29 de noviembre de 2018. La noche de este martes el sindicalista fue liberado, al ser uno de los 110 beneficiados por el “indulto” de Nicolás Maduro.
González fue privado de libertad por funcionarios al participar activamente en las protestas en defensa de los derechos laborales de la clase trabajadora venezolana.
El sindicalista fue acusado de «instigación a delinquir, violación de zona de seguridad, agavillamiento y coacción a la libertad de trabajo». Su condena era de siete años de cárcel.
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En enero pasado desde Amnistía Internacional emitió una acción urgente por la libertad de Rubén González, donde lo calificaban de preso de conciencia por lo que exigían a las autoridades venezolanas su inmediata e incondicional libertad.
La organización señalaba que desde su detención arbitraria, el pasado 29 de noviembre de 2018, González sufre de problemas de salud y sus condiciones de reclusión en la cárcel de La Pica desde hace más de un año, han empeorado su estado.
Al respecto, Henrique Capriles destacó en Twitter: ¡En Libertad Rubén Gónzalez! NUNCA debió pasar ni un solo día detenido. Un líder y luchador tenaz por los derechos de los trabajadores, regresa junto a su familia, luego de casi dos años de injusticia. Vaya mi abrazo solidario y afectuoso para él y toda su familia.
