Manuel Habreu es un artista plástico venezolano que migró a España, sin pensar que en el exterior encontraría su pasión y el éxito de hacer lo que más ama
El orgullo de escuchar que algún venezolano cumple sueños, forma parte de grandes proyectos, es incomparable, eso pasa con Manuel Habreu, un artista plástico, que encontró su pasión fuera de sus fronteras y ahora, gracias a su talento, disciplina y coraje, forma parte de un importante proyecto en España.
Habreu migró hace cinco años a Barcelona, ciudad de España, en busca de un futuro mejor, para él y su familia, sin pensar, que dos años más tarde su pasión por la pintura y por el arte iba a ser su nuevo estilo de vida, y la puerta para grandes proyectos, planes y cumplimiento de sueños.
Por eso, podemos definir que el corazón, talento y esfuerzo son los motores de este venezolano que día a día se despierta con la convicción de cumplir sus sueños, fueron estos mismos pilares que los llevó a formar parte de un equipo de artistas que construyó un mural en el río Besós de Barcelona.
Manuel contó a Impacto Venezuela lo feliz que estaba de formar parte de este proyecto, en el que tuvo la oportunidad de pintar 17 metros por 3 metros de alto de mural, con el arte que lo caracteriza: la pintura indígena, que, además, considera, es un homenaje a toda la cultura latinoamericana. De esta manera, tiene un sello y un gran aporte a la construcción del museo de arte al aire libre, más grande del mundo.
“En todo el proceso estamos acompañados del equipo del BesArt y queremos lograr con todos estos murales convertir este parque en el Museo Más Grande Del Mundo”, comentó.
Comenzó hace tres años
Comenzó exactamente hace tres años a pintar y de allí su crecimiento como artista plástico en el viejo continente ha sido gratamente palpable.
De formar parte de un proyecto colectivo que embellece la ciudad que lo recibió cuando decidió migrar, hasta tener un espacio para la exposición de sus pinturas.
Su primera exposición individual se encuentra expuesta en el Casal de personas mayores, el Besós, España. “Es un homenaje a mis raíces, a la cultura indígena. Tengo 24 pinturas en acrílico, 12 esculturas y 15 poemas, todos dedicados 100% a esta temática”, resaltó.
Al ser consultado, de cómo ha sido su proceso como artista al migrar a otro país, confesó que su proceso ha sido muy rápido, porque apenas lleva tres años pintando y aun así ya se encuentra en varias exposiciones, gracias al contactar con otras personas, y a acudir a otras exposiciones que le han permitido demostrar su talento y su arte.
No es de extrañar que sea su país, su cultura y sus raíces, su inspiración diaria para crear arte, es por eso, que destaca que se dedica a la pintura indígena. Es su principal motor para resaltar a través de la pintura de dónde viene.
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¿Por qué decidió emigrar?
La historia de Manuel Habreu es como la de millones de venezolanos que decidieron empacar sus sueños en una maleta y construir una vida llena de anhelos en otro país. Mientras desarrolla su talento como artista, trabaja en una fábrica de textiles durante nueve horas diarias y en sus tiempos libres le dedica tiempo a su pasión: el arte.
Más allá de la construcción de sus sueños, también anhelaba una vida mejor para sus seres queridos, con el tiempo logró el sueño de muchos: llevárselos a vivir con él a España.
Aunque trabaja duro por todos, tiene la satisfacción de estar cerca de los suyos y poder conquistar sus sueños al lado de ellos, en este caso, Manuel vive con sus padres que ya son mayores, y con su sobrina, que tal como él lo describe, es su adoración.
“Le estoy poniendo todo el corazón todo el esfuerzo de mi trabajo, por qué es lo que me gusta hacer. Yo tengo muchas metas y sueños para realizar en Venezuela. Para ayudar a los niños en las escuelas. Es mi mayor deseo. Deseo exponer y tantas cosas en mi país que extraño tanto”, reveló Habreu.
Las expectativas y lo que quiere lograr con su arte
Aunque ya ha tenido varios logros individuales, al comenzar a pintar en un país que no es el de él, lejos de casa, pero con un pincel y su creatividad a mil, a este venezolano, tal como lo dice, le queda aun mucho por lograr, sobre todo, porque desea, con su arte, ayudar a otros.
“Me gustaría que mis obras creen un impacto con la sociedad y que la gente se sienta identificada y orgullosa con lo nuestro, no necesariamente ser latino, sino que cada uno nos sintamos orgullosos con nuestras raíces”, reconoció Manuel, es uno de los grandes objetivos que tiene con sus obras.
Crear consciencia, tener un impacto y dejar un legado, resaltan como las principales metas por las que Manuel Habreu pinta en sus tiempos libres y trabaja porque sus pinturas y su arte cada vez tengan mayor alcance, sobre todo, para que las personas conozcan un poco más de su cultura y de dónde viene.
“Que mi obra sea un legado e inspire a las demás personas a que luchen por sus sueños, porque de verdad, sí, se puede”, concluyó, enviando un mensaje de resiliencia y confianza a todos aquellos que tienen grandes sueños. Manuel Habreu es el ejemplo que, con disciplina, constancia y creyendo siempre en ti, podrás llegar lejos y cumplir lo que tanto anhelas.