Las protestas por la muerte de Mahsa Amini han provocado una oleada de manifestaciones en Irán, que el ejecutivo es incapaz de contener
Otra joven iraní habría muerto a manos de la brutalidad policial mientras participaba en las protestas para reivindicar la muerte de Mahsa Amini.
Según Amnistía Internacional, Sarina Esmailzadeh, de 16 años y conocida por colgar vídeos en YouTube, fue asesinada por la policía el pasado 23 de septiembre. La joven recibió numerosos golpes cuando participaba en la manifestación en la ciudad de Gohardasht, en la provincia de Alborz.
Según el informe de AI, los familiares de la adolescente habrían sido “coaccionados” y “acosados” por los oficiales para “mantener silencio” acerca del fallecimiento de su hija.
El motivo que han dado desde Alborz para explicar su muerte ha sido el suicidio, alegando que la joven tenía problemas mentales y que se cayó del tejado de un edificio de cinco plantas.
Esmailzadeh era conocida por hablar de música, artes e incluso de mujeres en sus vídeos colgados en redes sociales. Subía clips en los que se puede apreciar a la joven cantando canciones, pero había más: críticas al uso del hijab o análisis de la mala situación económica en su país.
Otra víctima
La de Esmailzadeh no ha sido la única muerte causada por la represión de las fuerzas policiales en Irán, que vive un momento convulso que ha captado la atención internacional.
Nika Shakarami, de 17 años, desapareció el 20 de septiembre en Teherán después de haberle dicho a una amiga que estaba siendo perseguida. Todo apunta a que también falleció a consecuencia de una brutal paliza a manos de la policía iraní.
La historia se repite. Pese a que en el cuerpo de Shakarami había claras muestras de tortura, e incluso se llegó a hablar de una posible violación, los oficiales iraníes tiraron de nuevo de la cuerda de los problemas mentales. Shakarami también se había tirado desde el tejado de un piso y se había suicidado.
Nasrin Shakarami, madre de Nika, indicó en Radio Farda que su hija había sido “asesinada”. Además, denunció que la tía de Nika, que había hecho una aparición televisiva para hablar de lo sucedido, había sido “obligada” a contar la versión impuesta por los oficiales, en la que la joven “muere después de caerse de un edificio”.
“Las autoridades han llamado a más personas, a mis tíos, a más gente, diciendo que si no digo lo que ellos quieren, básicamente hablar de la situación que ellos mismos han creado, que harán esto y lo otro, me amenazaron”, relata la madre de Nika en unas declaraciones recogidas por la BBC.
Fuente: El Español