Zoraya era la gran favorita del Miss Venezuela 1995, pero perdió la corona con una Miss Universo y una Miss Mundo
En 1995, desde que se supo de la larense Zoraya Villarreal a las filas del Miss Venezuela se daba por descontado que ella sería la sucesora de Denisse Floreano.
Con su 1,80 de estatura, medidas perfectas y uno de los mejores rostros del concurso, la joven fue abriéndose camino. Traía, además, el aval de ser TSU en Administración, sus aspiraciones de convertirse en animadora y, por supuesto, en la nueva reina.
Desde muy pequeña, Zoraya Paola Villareal Mendoza estuvo involucrada en concursos de belleza. Asimismo, desde ese momento, mostró su faceta artística y para las pasarelas.
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Hábilmente, durante la presentación a la prensa de las candidatas para el concurso, se lanzó un monólogo que hizo pensar que ya la corona de Miss Venezuela tenía la medida de su cabeza.
Pero no fue así. La noche más linda del año 95, bajo la cúpula del Poliedro, Villarreal tuvo que conformarse con un puesto de semifinalista, pues las dos principales coronas fueron a parar a manos de quienes, a la postre, se convertirían en Miss Universo y Miss Mundo: Alicia Machado y Jacqueline Aguilera, respectivamente.
Sin embargo, en Zoraya las aspiraciones de saltar al medio artístico no se cancelaron. Al año siguiente, comenzó en Venevisión como animadora. Primero, del Kino (donde inció un romance con Daniel Sarcos), luego narró noticias en El Noticiero, estuvo en la primera plantilla de Portada’s y sus últimos pasos en la TV local los dio en Televen.
En el interín, fue seleccionada como Chica Polar y por más de cuatro años perteneció a la marca, hasta que la maternidad la hizo abandonar el tradicional calendario.
Actualmente, vive en Miami junto a su esposo, el empresario Luis La Rosa, con quien tiene tres hijos: Luis Alberto y los morochos Claudia y Ángel. Continúa con su trabajo en las redes.
