Múltiples ceremonias matrimoniales en Alemania. Sacerdotes desafían al Vaticano dando la bendición a homosexuales, lesbianas y heterosexuales
La bendición matrimonial recayó hacia parejas del mismo sexo por parte de numerosos sacerdotes católicos en toda Alemania, en una clara señal de rebelión contra el Vaticano.
Las uniones se realizaron en 110 iglesias comunales que organizaron las ceremonias “a todos los que se amen”.
De esta manera homosexuales, lesbianas y heterosexuales, junto a los sacerdotes, se adhirieron a la iniciativa “El amor gana”.
Sacerdotes, diáconos y voluntarios desafía así la prohibición de la iglesia católica de impedir la unión de estos grupos poblacionales.
“La resonancia es enorme”, subrayaron los organizadores, haciendo referencia a la gran cantidad de parejas que respondieron a la convocatoria.
Una iniciativa que continuará en los próximos días.
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Testimonios
“Cada vez más personas aspiran a tener una Iglesia más abierta, más libre y, sobre todo, más moderna”, declaró a la AFP Tanja Hollas, una de las contrayentes.
“Las dos somos muy religiosas (…) y es importante para nosotras que nuestra unión no sea sellada solamente ante el alcalde”, dijo.
Las banderas del arcoíris, utilizadas por la comunidad de lesbianas, gais, bisexuales, transgénero, queer + (LGBTQ +) también han aparecido en las fachadas de muchas iglesias en Alemania.
“Siento la necesidad de pagar la deuda que la Iglesia católica tiene con los homosexuales, que han sido discriminados y excluidos durante décadas”, señaló el sacerdote Wolfgang Rothe.
Sacrilegio y desobediencia
A mediados de marzo, la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano publicó una nota reafirmando que consideraba la homosexualidad como “un pecado”, confirmando la imposibilidad de que parejas del mismo sexo reciban el sacramento del matrimonio.
En ese contexto, 2.600 sacerdotes, instaron a la “desobediencia” a través de las redes sociales.
Entre los obispos de Alemania hay división, los más moderados la vieron como un intento de minar los esfuerzos de modernización de la Iglesia; mientras los conservadores han sido más receptivos.
En nombre de la Asamblea, su presidente Georg Bõtzing criticó globalmente la iniciativa de los sacerdotes, afirmando que estaban enviando una “señal incorrecta”.
Con información de AFP
