Aunado al revés de no ingresar a los BRICS, el Gobierno mantiene el peligro latente de que la OFAC no renueve algunas de las licencias petroleras
Ante los últimos acontecimientos que evidencian la poca confianza que hay sobre el gobierno de Nicolás Maduro en materia de hidrocarburos, especialistas en petróleo afirman que el anhelado aumento de la producción de crudo pudiera sufrir un revés en los próximos meses.
Esto sucedería efectivamente si la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos no renueva las licencias a empresas extranjeras como Chevron, Repsol y Enni, que han invertido con cautela ante la falta de garantías jurídicas en el país. Nuestro compañero Johan Álvarez nos trae los detalles.
Esto, aunado al revés sufrido por el Gobierno al intentar ingresar a los BRICS, pudiera tener mayor impacto en las necesidades de mayores ingresos a la nación.
Pese a que la decisión parece ser más de corte política, este organismo multilateral lo integran países con grandes reservas de petróleo en el que debería estar Venezuela, pero los niveles de desconfianza hacia la capacidad de respuesta de PDVSA pudieran influir incluso en que las inversiones extranjeras no continúen operando en territorio venezolano.
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“La única posibilidad que ellos tienen de recuperar lo que solo debe es aumentando la producción. Bueno, esos tienen interés en estar aquí, lo que no tienen es interés en hacer grandes inversiones, porque el negocio petrolero es muy difícil (…) nadie está dispuesto a hacer grandes inversiones si cada seis meses tienen que renovar las licencias, las inversiones petrolera tienen un período de maduración a veces de 10-15 años, nadie va a invertir grandes cantidades si a lo mejor en seis meses la OFAC no renueva la licencia”, argumenta el economista petrolero José Toro Hardy.
Chevron, Repsol y Enni son empresas que cuentan con licencias de la OFAC para seguir operando en Venezuela. Sin embargo, el riesgo de inversión sigue siendo muy alto ante los índices de inseguridad jurídica del país, lo que pudiera eventualmente alejar estar inversiones, que aunque aumentan la producción nacional, están cobrando con petróleo lo que les adeuda el gobierno de Nicolás Maduro.
“¿Va Repsol a participar en esa inversión de 25.000 millones de dólares que estábamos hablando por año? Yo no creo, este negocio se maneja de manera diferente y los inversionistas grandes saben cuál es el tiempo y necesitan seguridad jurídica claro”. explica Toro Hardy.
Es importante destacar que, según el último reporte de la OPEP, Venezuela produce cerca de 850 mil b/d, pese a que el gobierno de Maduro sostiene que la producción está cerca del millón de barriles, los cuales, según algunos especialistas, al menos el 25 % de esta producción corresponde a la explotación de las mencionadas empresas extranjeras, y no generan mayores ingresos a la nación.