Al menos dos familiares de las víctimas dijeron que la policía usó gases lacrimógenos de acuerdo a versiones que escucharon de algunos asistentes a la fiesta
El presidente de Perú, Martín Vizcarra pidió una “sanción ejemplar” a los dueños del club nocturno de Lima donde murieron al menos 13 personas. La estampida se produjo cuando la policía se presentó para detener una fiesta. Las reuniones de este tipo están prohibidas debido a las restricciones por el coronavirus. Las muertes son por aplastamiento y asfixia.
De las 23 personas detenidas por la policía 15 dieron positivo por COVID-19, dijo Vizcarra.
“Tengo pena y tengo tristeza por las personas y familiares de los fallecidos. Pero también tengo cólera e indignación con los irresponsables de organizar este tipo de eventos”, dijo el mandatario.
El Ministerio Público informó que 11 de las víctimas examinadas tenían el virus. Perú enfrenta un rebrote de la pandemia con una cifra que se acerca a los 600.000 infectados. Esta es la segunda más alta de América Latina -después de Brasil- y la sexta en el mundo.
Otras seis personas resultaron heridas, entre ellos tres policías, durante la redada. En la discoteca participaban unas 120 personas, afirmaron funcionarios policiales.
“Es un hecho sumamente grave”, afirmó Vizcarra durante una inspección de servicios médicos para combatir la pandemia en Arequipa.
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La intervención policial se produjo poco antes del inicio de un toque de queda dominical. Esta medida la decretó el gobierno hace más de una semana por un rebrote del coronavirus.
El hecho ocurrió en la discoteca Thomas Restobar. El antro funciona en un segundo piso del local en el distrito Los Olivos de Lima. La policía llegó alertada por los vecinos para detener la fiesta debido a la prohibición vigente.
El general de la policía nacional Orlando Velasco dijo que tras llegar al local la policía conminó a los asistentes a desalojar el club nocturno.
“En estas circunstancias que las personas empiezan a pugnar por salir. Se genera un tumulto todos se van unos contra otros”, dijo Velasco. “Lamentablemente hay 13 personas fallecidas”.
El Ministerio del Interior informó después en un comunicado que los asistentes a la fiesta clandestina intentaron escapar. Trataban de usar la única puerta metálica de ingreso, atropellándose y quedando atrapadas entre el acceso y una escalera del local.
Vizcarra lamenta repunte de contagios
Los contagios de COVID-19 en Perú han crecido a un promedio diario de 9.000 en los últimos cuatro días. El Gobierno reportó que los casos confirmados sumaron el domingo 594.326. Esto es el doble frente a lo registrado el 3 de julio. Mientras que los muertos ascendieron a 27.663, casi dos veces más que el 21 de julio. El presidente Vizcarra lamentó este repunte.
La policía indicó que los propietarios de la discoteca, una pareja de esposos, también fueron detenidos. Representantes del club nocturno no estuvieron disponibles para hacer comentarios.
Al menos dos familiares de las víctimas dijeron que la policía usó gases lacrimógenos de acuerdo a versiones que escucharon de algunos asistentes a la fiesta.
“¿En qué cabeza se le ocurre a la Policía hacer eso? Mi hija recién había entrado a la discoteca y no había tomado. Tenía 22 años y era universitaria. Me quitaron a mi hija”, se lamentó Nieves Cántaro.
Las autoridades negaron el uso de esos artefactos. “Rechazo esas manifestaciones porque la policía en ningún momento empleó bombas lacrimógenas y armas de fuego”, declaró el ministro de Interior, Pedro Montoya, a la televisora local Canal N.
