La solidaridad es la premisa entre los habitantes de varias zonas de Florida ante la posible llegada del huracán Idalia
El huracán Idalia ha puesto en jaque a las familias habitan en Florida, luego de que dieran la orden de evacuar ante una posible emergencia, no obstante, esto no es opción para muchos habitantes que tienen toda su vida viviendo en esta ciudad de Estados Unidos.
Como es el caso de John Paul Nohelj quien lleva más de 20 años viviendo en Steinhatchee, en el noroeste de Florida. Es un pueblo, situado en una región de marismas y bosques, y él asegura que no lo va a abandonar a pesar de esta alerta.
“He vivido en la costa de Florida toda mi vida y aquí es donde me encanta estar”, dijo el hombre de 71 años, que respira con la ayuda de una bombona de oxígeno para la agencia de noticias AFP.
Lea también: EMERGENCIA EN FLORIDA POR HURACÁN IDALIA: 1.6 millones de personas tienen orden de evacuar sus hogares
Huracán en ascenso
Este miércoles, Idalia alcanzará la zona como un huracán de categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, de cinco niveles, según las previsiones del Centro Nacional de Huracanes estadounidense (NHC). De confirmarse esa magnitud, los daños podrían ser catastróficos.
Decenas de personas ultiman sus preparativos antes de que llegue el temporal. La mayoría de ellas van a evacuar el pueblo, pero tratan de salvar una parte de sus pertenencias antes de irse.
En el centro del pueblo, varios habitantes entran y salen del único supermercado que permanece abierto, Maddie’s Market, junto a una gasolinera. Como en muchas casas, las ventanas del local están tapiadas con paneles de madera para protegerlas de los vientos huracanados, aunque aquí lo que más se teme son las inundaciones.
Las marejadas ciclónicas podrían alcanzar hasta 4,5 metros de altura en esta región rural conocida como el Big Bend.
La solidaridad, insisten varios habitantes de Steinhatchee, es una de las características de esta localidad. En los próximos días el huracán la pondrá sin duda a prueba.