La filicida ató de manos y pies a las niñas y las sumergió en baldes repletos de agua
La comunidad de Cabimas, en el estado Zulia, se encuentra consternada ante el filicidio ocurrido en dicha localidad, donde una mujer decidió ahogar a sus dos hijas de 2 y 3 años, dentro de unos baldes de agua.
El motivo de este doble homicidio sería la negación de la mujer de entregar la custodia de sus hijas al padre, quien estaría devuelta a Venezuela, para ocuparse de sus niñas.
Fuentes extraoficiales identifican a la mujer como Roselin Bennet Sandrea, de 38 años de edad, quien actualmente se encuentra detenida en las celdas de la subdelegación Cabimas, del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC).
La información preliminar del hecho índica que la abuela de las niñas habría encontrado los cuerpos atados de pies y manos, dentro de unos baldes repletos de agua.
La desesperada mujer habría notificado a las autoridades lo sucedido.
Cuando el CICPC comenzó con las averiguaciones y el interrogatorio, los detectives descubrieron que la propia madre habría cometido el filicidio.
El motivo que la habría llevado a cometer tan atroz crimen, fue la acción que emprendería el padre de las niñas, para tratar de recuperar la custodia de ellas.
Al parecer, el hombre, quien se encuentra fuera de Venezuela, le habría notificado su intención de volver al país por sus hijas.
El padre de las niñas supuestamente ya habría comprado una casa y estaría dialogando con unos abogados, para solicitar ante los tribunales la custodia total de las menores de edad.
La mujer, aparentemente, no estaba de acuerdo con esto y prefirió cometer el filicidio en contra de sus hijas de 2 y 3 años, antes de entregárselas al padre.
