Apoderarse del mucho gas que hay en las aguas de Gaza parece ser el real motivo del gobierno iraelí
El conflicto israelí-palestino tiene un aspecto poco conocido; el de los intereses israelíes por la energía en territorio palestino.
En la cuenca del Levante -aledaña a Gaza- en aguas de la parte más oriental del mar Mediterráneo, existen grandes reservas de gas.
La mayor de esos enormes yacimientos de gas están ubicados en las aguas costeras de la Franja de Gaza.
Israel no está dispuesto a compartir esa riqueza con los palestinos, y esa es una evidencia del interés REAL del gobierno israelí por acabar y sacar a los palestinos de Gaza.
Es que Israel siempre ha estado intentando tener el control exclusivo de la plataforma marina palestina.
Un poco de esta historia
En 1999, la empresa British Gas -hoy perteneciente a la compañía petrolera Shell- descubrió el yacimiento Gaza Marine.
Por aquel entonces el líder de la Autoridad Palestina Yasir Arafat lo llamó “un don de Dios”, que no solo proporcionaría combustible a toda la región, sino que también generaría ingresos con las exportaciones.
Inicialmente, Tel Aviv dio su consentimiento para perforar el sitio.
También se habló de suministrar el gas palestino a Israel.
No obstante, al cabo de un par de años el gobierno israelí rompió todos los acuerdos, declarando que el dinero que recibiría Palestina podría ser utilizado para “apoyar el terrorismo”.
Y de inmediato Israel comenzó las negociaciones con British Gas a espaldas de Palestina, insistiendo en que a esta última le pagaran no con dinero, sino con bienes y servicios.
Ya en ese entonces, el poder en Gaza estaba en manos de Hamás, una organización que, por cierto, había sido apoyada secretamente por el propio Israel para contrarrestar a la Fatah de Yasir Arafat.
Como resultado, el contrato fue anulado antes de haber podido llegar a un acuerdo.
A finales del 2008 Israel empezó la operación “Plomo fundido” y resultado de la intervención de Israel, los yacimientos fueron confiscados de facto.
Sin embargo, la explotación no se inició debido a su estatus controvertido.
El objetivo a largo plazo de Israel era evitar que los palestinos explotaran sus propios recursos naturales.
No se trata de mera retórica, sino de hechos confirmados, entre otras fuentes, por los informes de organizaciones internacionales. Según el informe del 2019 de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD): “Se calcula que las pérdidas acumuladas como resultado de la imposibilidad del pueblo palestino de desarrollar sus yacimientos de productos energéticos ascienden a miles de millones de dólares. El costo de oportunidad asociado al desarrollo socioeconómico perdido es significativo. Cuanto más tiempo persista esta situación, mayores serán este costo y los costos económicos acumulados de la ocupación soportados por los palestinos”.
Reales intereses
Hoy, todo apunta, cobrando cada vez más fuerza el indicio, evidencia, que los ocultos, reales, motivos de Israel son sacar a los palestinos de Gaza para tener pleno control de esos inmensos yacimientos de gas.
Israel podría asegurarle gas a Europa y Estados Unidos, sus aliados, quienes tanto apoyan -incondicionalmente- al gobierno israelí en esta guerra en Gaza.
y cual es el problema, se requiren gente tabajadora no terroristas