A pesar de que es muy común hablar sobre los trastornos alimenticios, existe una sociedad que no sabe cómo tratar o abordar estos problemas cuando suceden de cerca, acá te daremos algunos datos sobre a quien recurrir
En el mundo siguen existiendo problemas de vieja data, que con el avance del tiempo pese a contrarrestarse o disminuir, sigue habiendo un gran número de personas afectadas, como ejemplo de ello están los trastornos alimenticios.
Una afección que, pese al avance de la medicina, sigue estando allí, atacando a mentes inseguras y de baja autoestima, sobre todo por el exceso de información no comprobada que afecta a este tipo de personas vulnerables.
El rango de edad en el que predominan los trastornos alimenticios continúa siendo en la adolescencia, cuando el ser humano se encuentra en la búsqueda de su identidad y capaz no se halla o no se siente cómodo en su propio cuerpo. Es allí cuando comienzas las distorsiones que generan un trastorno.
La mayoría de las personas conocen solo dos tipos de trastornos: bulimia o anoréxica, lo cierto es que hay muchos más, los cuales afectan a los seres humanos y es más común de lo que se puede pensar.
En principio se hablaba de 10 trastornos:
Anorexia Nerviosa
Restricción y reducción de la ingesta nutricional que provoca una pérdida significativa de peso. La pérdida de peso puede venir dada por una restricción alimentaria acompañada de ejercicio físico intenso (AN restrictiva) o bien por autoprovocarse el vómito y abusando del uso de diuréticos o laxantes (AN Purgativa).
Bulimia Nerviosa
La Bulimia Nerviosa (BN) es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza por:
- Episodios de atracones (ingesta voraz e incontrolada), en los que se ingiere una gran cantidad de alimento en poco espacio de tiempo y generalmente en secreto.
- Presencia de conductas compensatorias inadecuadas para intentar rebajar los efectos de las sobre ingesta (mediante vómitos autoinducidos, aumento de la actividad física, ayuno, laxantes y/o diuréticos).
- Preocupación por la silueta y el peso: aun así, no se producen necesariamente alteraciones en el peso, ya que tanto pueden presentar peso normal, como peso bajo o sobrepeso.
Trastorno por atracón
Episodios de ingesta compulsiva de forma recurrente. Tiene muchas similitudes con la bulimia nerviosa. La diferencia principal es que la persona que sufre un trastorno por atracón no realiza conductas compensatorias (vómito autoinducido, abuso de laxantes y / o diuréticos, ayunos, ejercicio físico en exceso, etc). Al no haber conductas compensatorias, en la mayoría de las ocasiones hay un gran aumento de peso y puede llegar en algunos casos a la obesidad.
TCANE (Trastorno de Conducta Alimentaria No Especificado)
Los TCANE son habitualmente cuadros incompletos de Anorexia Nerviosa o Bulimia Nerviosa incompletos, tanto porque se encuentran en su inicio o porque están en proceso de recuperación. Por lo tanto, existen síntomas relacionados con la conducta alimentaria, pero no cumplen suficientes criterios para diagnosticar anorexia o bulimia nerviosas.
PICA
Es un trastorno que consiste en ingerir sustancias no nutritivas como, por ejemplo, arena o yeso. Es más habitual durante la infancia, y en algunos casos se presenta en niños que tienen autismo o un retraso mental.
Trastorno por Rumiación
Este trastorno se caracteriza por regurgitaciones repetidas de alimento, que van del estómago en la boca, donde se volverán a masticar. Estas regurgitaciones repetidas hacen incompatible el mantenimiento de un peso adecuado.
Trastorno por evitación / Restricción de alimentos
Este trastorno implica un rechazo a la alimentación y variaciones extremadamente caprichosas de lo que es una conducta alimentaria normal. Puede acompañarse de un trastorno por rumiación.
Sin embargo, con el paso del tiempo se han desarrollado otros diagnósticos como:
Vigorexia
Es la obsesión por un cuerpo musculoso. En 1993, el psiquiatra estadounidense Harrison G. Pope fue quien definió este trastorno como Vigorexia. También conocido como Complejo de Adonis, es un trastorno mental no estrictamente alimentario.
Ortorexia
Se trata de la obsesión por la comida saludable. En la Ortorexia hay una alteración en la conducta alimentaria y, a diferencia con otros trastornos de conducta alimentaria, el problema gira en torno a la calidad de la comida, no de la cantidad.
¿Poca desinformación para atender trastornos alimenticios?
Ante la preocupación por la consistencia de casos que padecen de trastorno alimenticio, y tal vez la desinformación sobre cómo tratarse alguno de estos casos, se investigó con especialistas que se debe realizar un trabajo multidisciplinario entre varios expertos de la medicina para atacar el problema del paciente.
Lo primordial es que haya consciencia sobre los padecimientos y patologías que presenta el paciente para actuar sobre el tratamiento que necesita de acorde al trastorno que refleja.
La nutricionista, Astrid Velandia, enfatizó a Impacto Venezuela que son los psicólogos los primeros especialistas que deben ingresar al cuadro multidisciplinario que ayudará a la paciente a superar los problemas alimenticios y su mala relación con la comida.
Sin embargo, que detalló que este equipo también lo deberían integrar gastroenterólogos, internistas y nutricionistas.
Velandia destacó que el acompañamiento del nutricionista, principalmente, es para educar al paciente sobre los alimentos. Aunque especificó, que a ningún paciente se le debe dar el mismo tratamiento porque cada trastorno alimenticio posee características diferentes.
Además, aseveró que la mayoría de las personas que sufren este tipo de trastornos posee una distorsión sobre el aporte real de los alimentos para su salud.
“La parte nutricional es la educación alimentaria y de allí es que se podrá ver el progreso del paciente, porque se espera es mejorar los hábitos o creencias que pueda tener las personas sobre la alimentación saludable”, aseveró.
La especialista, ejemplificó lo que ocurre con pacientes con Ortorexia y detalló que son tan extremistas en llevar una alimentación saludable que dejan por fuera un grupo de alimentos de gran importancia para su salud.
Lo que se debe tener en cuenta
Los especialistas, invitan al paciente a dar a conocer cómo es su vida en medio de estos trastornos, para entender cuáles son los “mitos y creencias” que puede tener sobre algunos alimentos.
Es en ese momento que los especialistas se avocan a aclarar el panorama del paciente con trastorno alimenticio para que comprendan de a poco lo que está bien y lo que no está bien en su alimentación.
Hay que tener en cuenta que ninguno de estos pasos en sencillo ni rápido, los pacientes comenzarán a tener cambios graduales muy mínimos que para los familiares pueden ser prácticamente imperceptibles.
La nutricionista reiteró a Impacto Venezuela que estos procesos pueden tardar hasta años.
“Es un progreso gradual, pero se puede llevar hasta años para que una persona pueda sanar trastornos alimenticios, es un trabajo arduo y progresivo, se verán cambios pequeños y graduales, pero lo importante es ver avances tanto en salud como a nivel mental”
Astrid Velandia – nutricionista