A partir del 9 de marzo se estima que llegue el polvo del Sahara a Venezuela sin grandes consecuencias, según los expertos
En grandes proporciones, el Polvo del Sahara puede causar enfermedades respiratorias por la contaminación y peligros para la aviación, pero en el caso de Venezuela esto no ocurrirá.
El gerente general de Meteorología del INAMEH, Ángel Graterol, explicó que el fenómeno consiste en partículas de polvo en suspensión provenientes del Desierto del Sahara, uno de los más grandes del planeta.
En una entrevista en Unión Radio indicó que las concentraciones de este polvo serán mínimas en el país, de 1 a 10 microgramos por metro cúbico.
Esto se traduce que debido a la cantidad de calima por los incendios forestales que se registran actualmente en varios estados, no se notará el polvo a simple vista y Venezuela no se verá muy afectada.
Detalló que «los fuertes vientos hacen que este polvo se trasladen por el Atlántico hasta varios países de la cuenca caribeña. Esta suspensión de polvo puede llegar hasta los 9 mil metros y también llega a la superficie».
Lea también: El polvo del Sahara está de regreso en Venezuela (+ Detalles)
¿Qué es el polvo de Sahara?
De acuerdo al portal especializado National Geographic, las superficies de desierto seco del norte de África son las fuentes más grandes y constantes de polvo del mundo.
Muchos nos preguntamos cómo llega a Venezuela, y es que las dunas de arena no suelen ser las responsables de proporcionar el polvo; solo los vientos más intensos son capaces de levantar estas partículas pesadas.
La suspensión de polvo viaja kilómetros y trae afecciones respiratorias, pero también y ayuda a las aguas del mar y la Amazonía.
Graterol indica que es un fenómeno normal, porque no se contaban con una tecnología que pudieran detectarlo. Explicó que en esta oportunidad el polvo del Sahara será imperceptible, sin embargo, aseguró que para los meses de junio y octubre, si se espera que se presente con mayor densidad.
Concentración del polvo del Sahara
El polvo de la nube del Sáhara consta principalmente de fragmentos de minerales que solían ser roca, indica National Geographic.
En el caso de España hay zonas, como las Canarias, donde la mayor parte del polvo que cae mide menos de 20 micrones de diámetro, la mitad del tamaño de una partícula observable a simple vista.
Mientras que cuando una nube cruza el océano y llega al Caribe, el polvo que cae es aún más fino —menos de 10 micrones de diámetro— y muchos de los fragmentos restantes son más pequeños.