En los laboratorios más conocidos de Caracas, una prueba PCR-RT para detectar la COVID-19 cuesta 80 dólares para adultos y 100 para niños menores de 12 años
Un paciente con síntomas de COVID-19 en Venezuela tiene que disponer de 40 a 100 dólares para pagar un análisis que determine si ha contraído la enfermedad. De lo contrario, debe peregrinar por los centros públicos en busca de un improbable examen gratuito u optar finalmente por el autodiagnóstico.
Las pruebas diagnósticas directas, ya sea un test PCR-RT o de antígenos, son la manera de corroborar la presencia del virus del SARS-CoV-2 en el organismo. Pero varios especialistas han manifestado su preocupación ante las dificultades que atraviesan los venezolanos para acceder a estos estudios de manera gratuita.
Y es que el salario mínimo mensual venezolano es de 7 bolívares, lo que equivale a 1,5 dólares. Es un monto con el que ningún ciudadano puede pagar los costos de un análisis de COVID-19. Mucho menos, el tratamiento para paliar la enfermedad.
El presidente de la Sociedad Venezolana de Infectología, Manuel Figuera, tiene presente esta dificultad. Recordó a Efe que el Estado debe garantizar estas pruebas gratuitas, “cosa que, lamentablemente, no ha hecho”. Ha dejado a los ciudadanos indefensos ante la pandemia.
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No hay registro… no hay pruebas
Figuera aseguró que actualmente los pacientes con síntomas de COVID-19 deben recorrer distintos recintos públicos para hacerse el test. Las pruebas no están disponibles con regularidad en esos lugares.
“En el pasado, incluso en los centros privados estaban haciendo pruebas de este tipo y ya desde hace mucho tiempo las dejaron de hacer. Hoy en día, lamentablemente, las personas disponen de manera principal de pruebas privadas. Pero, las mismas, desde el punto de vista epidemiológico-estadístico, no son incluidas dentro de la estadística nacional”, apuntó el también infectólogo.
Así, el especialista sumó el problema del subregistro de casos positivos al acceso limitado a pruebas de descarte de covid-19.
Figuera se refirió al surgimiento de nuevos laboratorios que funcionan en oficinas comerciales, hoteles e incluso estacionamientos. Allí ofrecen la prueba sin que la data de casos positivos sea enviada a instancias del Ejecutivo. Por ende, se obvia estos resultados de su conteo oficial.
Esta es una de las razones por las que, en días recientes, la Sociedad Venezolana de Infectología recomendó ampliar la disponibilidad gratuita de pruebas directas.
Los médicos emitieron un comunicado en el que destacaron la importancia de “ampliar la disponibilidad gratuita de pruebas”. Lo hacen “de modo que las personas sintomáticas y sus contactos puedan aislarse oportunamente en caso de positividad”. La falta de diagnóstico también influye en la propagación del virus.
“Lo más importante es que la persona que tiene síntomas desde el primer día debería hacerse una prueba y no esperar. Si desde el primer día se detecta un caso positivo y se aísla, vas a evitar más contagios”, expuso Figuera.
Atrapados
En los laboratorios más conocidos de Caracas, una prueba PCR-RT cuesta 80 dólares para adultos y 100 para niños menores de 12 años.
En cuanto a las pruebas de antígenos, el costo es de 40 dólares en adultos y 60 para menores de 12 años.
Todos los costos en laboratorios son expresados en la divisa estadounidense y los ciudadanos pueden pagar en moneda extranjera o al cambio en bolívares.
Pero, los venezolanos que ni siquiera tienen para pagar el menos costoso de los análisis, se ven obligados a presumir la enfermedad, guardar algunos días de reposo y esperar que la COVID-19 se vaya de su organismo como llegó, sin dejar rastro.