De acuerdo a un experto republicano”la relajación de las sanciones mejoraría la economía venezolana y desaceleraría la migración a los EE.UU.”
Elliott Abrams trabajó a las órdenes de Ronald Reagan, George W. Bush y Donald Trump y tiene en su historial una larga lista de operaciones consideradas estratégicas por Estados Unidos con denuncias, condenas y hasta un indulto. Sin embargo, los años pasan y Abrams siempre es requerido para una nueva misión.
Si alguno de sus detractores llegó a pensar que la derrota de Trump en las elecciones de 2020 lo había dejado al margen de la política, Joe Biden acaba de desmentirlo.
Hace dos semanas, con la mayor discreción posible, el presidente demócrata postuló al republicano Abrams para que integre la comisión asesora bipartidista sobre Diplomacia Pública en el Congreso, un área clave que tiene cuatro lugares vacantes.
El nombramiento del halcón que fue condenado en Estados Unidos por la operación Irán-Contras ingresó en un trámite que, según los especialistas, puede tardar entre tres y cuatro meses en el Senado. Pero ya le devolvió una centralidad importante al ex representante especial para Venezuela que designaron Trump y su ex secretario de Estado Mike Pompeo. Ahora, con 75 años, su voz vuelve a oírse con más fuerza.
Abrams acaba de encender sus alarmas por la inhabilitación para ejercer cargos públicos que ordenó en Venezuela Nicolás Maduro para la candidata antichavista María Corina Machado. El pronóstico de que Maduro no permitirá elecciones libres el año próximo llevó al ex funcionario estadounidense a sentenciar que “la política de Biden en Venezuela está muerta”.
Desde Londres, Abrams atendió a La Política Online y aceptó responder una serie de preguntas sobre el tema.
-Machado fue inhabilitada para competir y usted escribió un artículo en el que afirma que Maduro no va a permitir elecciones libres. ¿Por qué considera que Machado es mejor o distinta a Henrique Capriles o Juan Guaidó, los candidatos que antes enfrentaron al chavismo?
-Machado fue declarada “inhabilitada” porque lideraba las encuestas, y esa medida del régimen de Maduro fue otra señal importante de que no permitirá unas elecciones libres. Nunca he manifestado una preferencia a favor o en contra de ella, Capriles o Guaidó, y como extranjero en Venezuela sería inapropiado hacerlo.
-¿Qué representaría para Estados Unidos y el Partido Republicano una victoria de Machado en Venezuela?
-La victoria de cualquier candidato democrático sería una gran victoria para el pueblo de Venezuela y para todas las personas que desean ver allí la democracia y el respeto a los derechos humanos. Estados Unidos y el Partido Republicano no tienen un solo candidato que apoyemos. Lamentablemente, hay muchas razones para anticipar que Maduro impedirá tanto las primarias como una elección libre de cualquier tipo.
-Dijo que la política de Biden en Venezuela “está muerta” y que el presidente alteró la política dura y bipartidista que había heredado en relación a Maduro. ¿Qué responsabilidad tiene el Partido Republicano en el giro que usted advirtió?
-El Partido Republicano no es responsable de la política de Biden. Bajo Trump, no hubo relajación de las sanciones petroleras, ni acuerdos con Chevron, ni visitas de Juan González – director de Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional- a Caracas, ni abandono de la oposición democrática.
-Afirma que lo primero que hizo Biden fue permitirle a Chevron y a las compañías petroleras estadounidenses extraer petróleo de Venezuela. ¿Considera que Biden y Chevron tienen una alianza económica que define la política demócrata en Venezuela?
-Esto es muy llamativo. Durante décadas, el Partido Demócrata fue el partido alineado con los trabajadores, y los Republicanos fueron el partido de los negocios. Pero la administración republicana rechazó todas las propuestas de Chevron, mientras que los demócratas le dieron lo que querían. ¿Por qué? Usted tendría que preguntarle a la Casa Blanca. Pero parece que la migración fue la explicación: la opinión de que cierta relajación de las sanciones mejoraría la economía venezolana y desaceleraría la migración a los EE.UU.
No tiene candidato todavía
Aunque Trump aparece como muy claro favorito en las filas republicanas camino a los comicios presidenciales, Abrams afirma que todavía no ha decidido apoyar a ningún de los candidatos de su partido que se anotaron para desafiar a Biden.
Sin embargo, advierte que todos los republicanos que manifestaron su aspiración de llegar a la Casa Blanca adoptaron una línea dura contra el régimen de Maduro y critican la relajación de las sanciones. “Sigo apoyando una política exterior internacionalista en la que Estados Unidos actúe para proteger sus intereses nacionales, sus aliados y la causa de la democracia en el mundo”, dice.
Con información La Política Online