Elvis compartió la tarima con Rivera, los Omares y una sorpresa especial
Fue una larga jornada que se extendió hasta la madrugada de este sábado 18 de noviembre. Como si un amanecer de Feria de La Chinita se tratara. Elvis Crespo, Jerry Rivera, Omar Enrique y Omar Acedo fueron los protagonistas del Mano a mano del año, como se denominó el espectáculo.
Pero durante la larga jornada, una invitada especial irrumpió en el show de Crespo y dejó a todo el mundo atónito cuando empezaron a sonar las notas de una de sus más conocidas canciones.
Se trató de Miriam Cruz, “quien recibió vítores y cantaron un tema juntos, pero no fue sino hasta cuando interpretó La loba cuando la mayoría del público se dio cuenta de que se trataba de la exvocalista de la agrupación Las chicas del can. El público le pidió incesantemente que cantara Juana, la cubana, y luego de cierta complicidad con la banda, regaló algunos extractos del exitoso tema”, reseñó la periodista Lenys Martínez.
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Después de los Omares, fue el merenguero boricua el encargado de prender la terraza del Ccct. Poco antes de medianoche del sábado, y hasta pasada la una de la madrugada del domingo, Elvis se dio con todo con sus temas icónicos como Nuestra canción, Píntame, Bandida, Besos de coral y Tu sonrisa, entre otros.
Ya el nuevo día recibió en la tarima a Jerry Rivera. El eterno “bebé de la salsa” se sacó la espinita de su espectáculo del año pasado en el mismo sitio; cuando subió a cantar con asma y bronquitis.
Rivera cantó hasta las 2:30 am, según Martínez. “Vuelta muy alto, Dime, Esa niña, Nada sin ti, Día y noche pienso en ella, A ti mi nena, Lloraré, Desnúdate mujer, Mi libertad, Solo tú (en balada y salsa), Cuenta conmigo, Casi un hechizo, Me estoy enamorando y Qué hay de malo; aunque faltaba el himno. El de las trompetas. Además, el tiempo daba señales que se acercaba el final. Y sí, a las 2:30 de la madrugada le tocó el turno a Amores como el nuestro“, y así hizo el salsero su falso final.
La oportunidad, como es su costumbre, concluyó la larga velada entre papelillos, fuegos artificiales y la gente que llenó la terraza bailando al mismo tiempo.