De la masacre de Santa Rita, perpetrada por un grupo armado el pasado miércoles se siguen conociendo detalles gracias a los testigos que sobrevivieron a este cruel y planificado ataque
Al mejor estilo de las películas de acción, diez hombres armados llegaron en dos lanchas a eso de las 9:30 de la noche del miércoles hasta la orilla del restaurante Frente al Lago, ubicado en el sector El Mene del municipio Santa Rita.
Justamente esa noche Jenny Domínguez, de 24 años, su hija de 6 años y una hermana de 15 se encontraban pescando la señal de agarrar Wifi, cerca del restaurante Frente al Lago, reseña La Nación.
Jamás se imaginaron que vivirían una noche de terror, ya que fueron sometidas por los delincuentes.
¿Comando criminal?
La versión de los testigos indica que los diez sujetos armados, se desplazaron sigilosamente desde la orilla de la playa, pegados a la pared del restaurante.
Esto le permitió acercase a Jenny y a las dos menores, para someterlas. Le pidieron que llamaran y tocaran la puerta del restaurante para que abrieran. Bajo la amenaza de muertas, la mujer aceptó.
Quienes estaban en el interior del restaurante Frente al Lago, abrieron la puerta y en ese instante la niña de seis años salió corriendo a la casa de al lado en busca de sus abuelos maternos, María Montero, de 47 años y José Adelmo Domínguez, de 61.
De acuerdo a la prensa local, “sin saberlo uno de los delincuentes la siguió y capturó nuevamente a la niña y a sus abuelos”.
Una vez lograron someter a la niña y sus abuelitos, los llevaron hasta el interior del restaurante,cerrado desde hace tres meses.
El comando delincuencial tenían ya sometidos a Jenny Domínguez, su hermana quinceañera y las cuatro personas que vivía en ese lugar: Magly La Concha, de 61 años; su hijo, Liduin Cárdena La Concha, de 35; su mujer Génesis, de 28 y Luis La Concha, padre de Magly.
Ataque despiadado
Las dos menores, la niña de 6 años y su tía de 15 años fueron encerradas en un cuarto; mientras que a los siete adultos los agruparon en la sala.
Luego de revisar toda la casa, los delincuentes abrieron fuego sin ninguna contemplación. Según trascendió utilizaron con pistolas calibre 9 mm.
La lluvia de bala alcanzó a las cuatro mujeres y los tres hombres, quienes se encontraban indefensos antes semejante barbarie.
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Intervención policial
El estruendo de las balas alertaron a los vecinos, quienes buscaron ayuda policial , específicamente de la de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Al llegar al sitio de los acontecimientos se produjo un breve intercambio de disparos sin victimas.
Sin embargo, los diez hombres huyeron. Sobre el escape estiman que lograron descender en otra playa de ese municipio para terminar de escabullirse en autos.
Noche sangrienta en Santa Rita
Se presumen que tenían planeado de matar a las dos menores para no dejar testigos; pero al iniciarse la balacera tuvieron que salir corriendo del lugar.
La jornada sangrienta dejó un saldo de cinco personas asesinadas y otras dos heridas.
Las víctimas fatales son Jenny Domínguez, su padre José Adelmo Domínguez; Magly La Concha, su padre Luis La Concha y su hijo Liduin Cárdenas.
Mientras que corrieron con mejor suerte María Montero y Génesis, quienes resultaron heridas.
Ambas recibieron disparos en brazos y piernas e igualmente sobrevivieron al despiadado ataque.
