Hay hermetismo en la cárcel de La Pica sobre la identidad de las víctimas
Con signos de estrangulamiento, los cadáveres de dos recluso del Centro Penitenciario de Oriente (CPO), también conocido como cárcel de La Pica, ingresaron a la unidad de Anatomía Patológica del hospital central de Maturín.
Los privados de libertad murieron en extrañas circunstancias luego producirse un hecho irregular tras los muros de la penitenciaria del estado Monagas.
El Periódico de Monagas cita fuentes ligadas al caso. Las mismas aseguran que hasta el momento nadie ha reclamado los cuerpos y tampoco los han identificado.
Los investigadores indicaron que al momento de trasladar los cadáveres no había documentación alguna que perdiera indicar sus identidades. Y tampoco nadie en el penal dijo cómo se llamaban las víctimas.
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Organismos de investigación adelantan las experticias del caso. Los parientes no han ido a la morgue para reconocer y reclamar los cuerpos.
Se presume que la falta de efectivo y transporte público por la cuarentena radical dificulta la movilización de los deudos hasta el nosocomio para realizar el papeleo correspondiente.