El primer ministro de Canadá permaneció en silencio durante ocho minutos y 46 segundos, el tiempo que un oficial de policía blanco de Minneapolis se arrodilló sobre el cuello de George Floyd
Justin Trudeau se sumó este viernes a miles de personas y se arrodilló frente al parlamento de su país en solidaridad con los manifestantes estadounidenses que marchaban contra el racismo y la brutalidad policial.
Esta aparición pública de Trudeau, una de las pocas que ha realizado desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, fue muestra de la dimensión que tomaron en el extranjero las protestas iniciadas en Estados Unidos luego que un policía en Minnesota asesinara a un hombre negro desarmado.
“Demasiados canadienses sienten miedo y ansiedad al ver a los agentes de la ley”, dijo Trudeau en su conferencia diaria más temprano ese día.
“En las últimas semanas, hemos visto a un gran número de canadienses despertar repentinamente al hecho que la discriminación es una realidad vivida por muchos de nuestros conciudadanos y que es algo que debe terminar”, afirmó.
Trudeau, quien portaba una camiseta con la leyenda “Black Lives Matter”, cantó con la boca cubierta por una máscara junto a la multitud que ocupaba varias cuadras hasta la embajada de Estados Unidos.
Luego permaneció en silencio durante ocho minutos y 46 segundos, el tiempo que un oficial de policía blanco de Minneapolis se arrodilló sobre el cuello de George Floyd, un afroestadounidense desarmado que murió tras clamar que no podía respirar.
El video de la muerte de Floyd el 25 de mayo se volvió viral y provocó violentas protestas en Estados Unidos y manifestaciones masivas en capitales europeas y en otros lugares del mundo.
