Sobre la tercera mujer herida se pudo conocer que fue simplemente una víctima de la circunstancia, que no guarda relación alguna ni con las víctimas ni las bandas
Los detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), orientan sus averiguaciones por el doble feminicidio ocurrido la noche de este lunes en Petare, hacia un posible ajuste de cuentas.
Las víctimas, Yelimar Barrios (32) y Lizamar González (30) recibieron múltiples impactos de bala en el rostro y cuerpo. Al parecer, las mujeres fueron asesinadas por miembros de la banda de Los Chicorrios, grupo hamponil que opera en el barrio San José de Petare, donde ocurrieron los hechos.
La banda les habría quitado la vida, ya que las mujeres supuestamente ofrecían información a terceros sobre los movimientos de Los Chicorrios en el barrio y sus andanzas.
Lo que investiga el CICPC
Inicialmente, la noche del lunes #15Nov se conoce la noticia de que en un enfrentamiento entre bandas, dos mujeres perdieron la vida y una tercera resultó herida, en el sector La Plazoleta del barrio San José de Petare.
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En un principio nombran a la banda de Wileisis (grupo criminal de consideración que domina de manera ilegal varios sectores de Petare) como parte de los antisociales que intercambiaron balas con otros hampones del sector.
Posteriormente, se conoce que no es la banda de Wileisis quien dispara, sino Los Chicorrios, un grupo de jóvenes que está en ascenso y que tiene fuertes diferencias con los antes nombrados.
Los Chicorrios supuestamente ingresan a una casa donde habitan las dos mujeres en la parte alta del sector La Plazoleta. Las sacan a golpes y por los cabellos, arrastran a las dos mujeres hasta las escaleras, donde, en medio de los gritos de clemencia por sus vidas que emiten las víctimas, los hampones descargan sus armas en las dos humanidades.
Al momento de huir del lugar y después de los múltiples disparos que hicieron, Los Chicorrios continúan con un festín de tiros a diestra y siniestra. Es allí, según una fuente extraoficial, cuando escaleras más abajo hieren a la tercera víctima.
Yessica González recibe un tiro en la cabeza. Tanto familiares como vecinos la auxilian y la llevan hasta un centro asistencial de la zona, donde los médicos logran salvarle la vida. Sin embargo, su pronóstico es reservado y se encuentra bajo supervisión médica.
González es una simple víctima de las circunstancias, no tenía nada que ver con el evento ocurrido en La Plazoleta.
Con respecto a quién supuestamente suministraban información las mujeres aún no está claro para los investigadores. El CICPC no descarta también la posibilidad de una muerte por encargo.
Sí hubo tiroteo
La misma fuente comenta que una vez que Los Chicorrios asesinan a las dos mujeres, Wileisis y su gente se acercaron al barrio San José. Allí se produce un intercambio de disparos en horas de la noche del lunes.
Aunque no hubo reportes de heridos, se conoció que Wileisis dispara contra sus enemigos, Los Chicorrios. No se sabe si las mujeres asesinadas guardan algún tipo de relación con este antisocial buscado por las autoridades.
Minutos después comisiones de la Policía de Miranda y de la municipal de Sucre llegan al sitio del suceso. Se encuentran con que las víctimas yacían en los peldaños de las escaleras.
Posteriormente, llegan los detectives del CICPC para el respectivo levantamiento de los cadáveres y el inicio de las averiguaciones.
