La alta comisionada para los DD.HH. de la ONU instó al oficialismo y la oposición a retomar el diálogo
Michelle Bachelet, alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, concluye su mandato el 31 de agosto y este jueves, durante una rueda de prensa, donde presentó el balance de su gestión, se refirió expresamente a la situación de Venezuela.
En este contexto, anunció que llamará a Nicolás Maduro, para recordarle las promesas que no cumplió, en relación con los informes emitidos sobre el país y sus recomendaciones.
“Tengo la intención de tener una nueva conversación con el presidente Maduro antes de dejar el cargo, probablemente la próxima semana, porque no quiero que las conversaciones y las promesas se olviden. Siempre que hablo con él, le doy un largo listado de temas en los que consideramos que se debe trabajar mucho más”, dijo la alta comisionada.
Recordó sus conversaciones con las víctimas de violaciones de DD.HH, en el país, durante sus visitas. “Compartí el dolor de un padre en Venezuela que me enseñó las medallas deportivas que su hijo adolescente había ganado, antes de que lo mataran durante las protestas de 2017″l, lamentó.
Sin embargo, aclaró que durante su gestión y ante los problemas con los Derechos Humanos en el país, ha habido algunos avances.
“Lo que hemos logrado es construir cooperación y confianza con autoridades, sociedad civil y víctimas en los últimos tres años. No teníamos nada, estábamos fuera de Venezuela y ahora podemos tener ahí 16 oficiales de derechos humanos y personas”, resumió, según una reseña de la agencia Efe.
Los representantes de la oficina de Bachelet en Caracas trabajan con víctimas de violaciones de derechos humanos y han podido visitar cárceles donde se encuentran prisioneros políticos, aunque las visitas se suspendieron, por la pandemia de COVID-19. Se desconoce si estos enviados especiales han seguido con esas visitas.
Aboga por el diálogo
Por otra parte, la expresidenta chilena, insistió en que el oficialismo y la oposición hagan todos los esfuerzos por retomar el diálogo.
“Es muy importante que prosigan las conversaciones de la oposición y el gobierno”, afirmó Bachelet en su rueda de prensa de despedida, pocos días antes de dejar su cargo el 31 de agosto.
“Espero que se reanuden para que haya algunos acuerdos y que así las próximas elecciones se celebren de manera transparente y justa. De esa forma todos sentirán que los resultados realmente representan lo que el pueblo venezolano quiere”, añadió.
43 recomendaciones
En junio de este año, decenas de ONG recordaron las 43 recomendaciones que la oficina de Bachelet hizo a Nicolás Maduro, en materia de respeto a los DD.HH, entre el 2019 y el 2021.
Desde ese año, siguiendo las recomendaciones de la ACNUDH, el Estado venezolano debía: “Poner en libertad a todas las personas detenidas arbitrariamente, detener y prevenir el uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones, garantizar los derechos a la alimentación, el agua, el saneamiento, la salud, la seguridad y la dignidad de todas las personas privadas de libertad”.
Las organizaciones denuncian que “lamentablemente, ninguna de esas recomendaciones se ha cumplido”.
En sus informes, la funcionaria hizo énfasis en la “independencia del Poder Judicial”, como elemento indispensable para reducir las violaciones a los DD.HH. y garantizar que cese la impunidad.
Por ello, recomendó: “Llevar a cabo investigaciones prontas, efectivas, exhaustivas, independientes, imparciales y transparentes de las violaciones de los derechos humanos.
Garantizar el derecho de las víctimas a interponer recursos y obtener reparaciones, y adoptar medidas efectivas para restablecer la independencia e imparcialidad del sistema judicial, la Fiscalía General y el Defensor del Pueblo”.
A ello se suma “establecer un mecanismo independiente, imparcial y transparente para aumentar el número de jueces y fiscales titulares por medio de un proceso público transparente”.
No obstante, “la independencia e imparcialidad de jueces y fiscales continúa seriamente deteriorada”, aseguran las ONG.
Asimismo, el Estado debía “adoptar todas las medidas necesarias para garantizar la disponibilidad y la accesibilidad de alimentos, agua, medicamentos esenciales y servicios de atención de la salud”. Además de “garantizar ingresos suficientes para los trabajadores públicos”.
“Desafortunadamente, la totalidad de dichas recomendaciones continúan sin ser implementadas, lo que ha mantenido una situación crítica en ese ámbito, al punto que, a la fecha, la gravedad de los indicadores de la Emergencia Humanitaria Compleja no se ha disipado”.
Conclusiones
Las organizaciones y activistas por los DD.HH. enfatizan que “entre 2019 y 2021 la ACNUDH emitió un total de 43 recomendaciones. Lamentablemente, el Estado venezolano no ha dado cumplimiento integral a ninguna de ellas, mostrando en un total de 33 recomendaciones un franco retroceso”.
En este sentido, destacan “las detenciones arbitrarias y la separación de poderes. El margen de tolerancia al incumplimiento del Estado dado por la ACNUDH ha debilitado sus recomendaciones y la ha llevado a replantearse en términos menos contundentes”.
Para las ONG, “el incumplimiento de las recomendaciones por parte de las autoridades gubernamentales ratifica la necesidad de contar con otros mecanismos complementarios para el establecimiento de responsabilidades, pudiendo ser la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos uno de ellos”.
