Un estudio de un psicólogo británico indica que 68% de las parejas que no tienen contacto durante las horas de sueño, son más exitosos en el trabajo y en sus quehaceres
No hay nada más divino que dormir acurrucado con la pareja. Esa persona que te comprende, ama y te hace feliz, puede ser la ideal para tenerla contigo a lo largo de tu vida, pero ¿será la persona perfecta para que este a tu lado al momento de descansar?
Dormir en pareja puede tener sus contra. El simple hecho de una patada, una batalla campal por una cobija, el ruido al roncar o una tv prendida pueden ser causales de problemas que van más allá de una simple discusión en la cama.
Una encuesta realizada por una compañía de colchones en Ciudad de México indica que seis de cada diez parejas que duermen juntas, solamente descansan cinco horas diarias. Esto producto de las diferencias que intentan dirimir de manera inconsciente cuando descansan de sus largas jornadas laborales o de estudio.
La falta de descanso placentero trae como consecuencia fallas en el sistema nervioso y en las condiciones motoras, que pueden traducirse en mal humor, falta de coordinación y somnolencia, que al final pueden dejar como resultado malhumor, fallas en el trabajo y desempeño deficiente en cualquier actividad laboral, así como posibles daños en la salud.
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Lo normal es que una persona pueda dormir entre siete y ocho horas. Sin embargo, cuando se comparte el mismo cuarto diversos factores pueden influir en el sueño de otro. Aún más si se comparte la misma cama.
Estudio de pareja
Un estudio del psicólogo británico, Richard Wiseman de la universidad de Hertfordshire, indica que 68% de las parejas que no mantienen un contacto físico con sus parejas al momento de realmente descansar, suelen ser personas con días más productivos.
Incluso, entre las parejas hay mejor comunicación, que aquellos que comparten más de ocho horas la misma cama.
Otro dato importante del estudio del psicólogo británico revela que hay un 42% de parejas con insomnio. Esto debido a los ronquidos y los constantes movimientos de los individuos en el lecho del descanso.
¿La solución?
Algunos expertos consideran que la solución está en que las parejas duerman en camas separadas.
Otro estudio de la Universidad de Harvard reza que las personas que pueden tener un descanso placentero continuo, tienden a ser menos propensos a desarrollar enfermedades cardiacas, diabetes e incluso la obesidad.
La pregunta es ¿seremos capaces de dormir solos y no acurrucados, después de que nos acostumbramos a eso?