El responsable fue detenido por la policía, horas después del evento, el cual ha sido catalogado como un acto terrorista
A tan solo horas de comenzar el duelo nacional de tres días, por el tiroteo ocurrido en una escuela en Serbia por un niño de 13 años, otro incidente armado, catalogado por las autoridades como un acto terrorista, suma 8 muertos y 14 heridos en Serbia.
Las autoridades serbias detuvieron a un joven de 21 años, quien habría disparado a bordo de un vehículo en por lo menos tres localidades del país balcánico, por lo que diversas unidades de policía, incluyendo los grupos antiterrorismo, tuvieron que desplegarse por aire y tierra, bloqueando las vías que conectan a las localidades de Mladenovac, al sur de Belgrado y dos zonas aledañas.
Según el informe policial, el joven de 21 años fue detenido horas después de los sucesos.
Helicópteros de policía sobrevolaban temprano el viernes el lugar del último suceso, donde se percibía una fuerte presencia de las fuerzas de seguridad, constató un fotógrafo de la AFP.
Alrededor de 600 agentes fueron desplegados en el lugar, según la cadena RTS, incluidos miembros de la unidad antiterrorista que patrullaban la autopista.
La carretera que conecta con las localidades de Malo Orasje y Dubona, donde ocurrió el tiroteo, habían sido intervenidas por la policía.
Sobre los heridos se pudo conocer que todos fueron trasladados a centros asistenciales, sobre todo en la localidad de Belgrado, donde en un solo centro sanitario hay ocho heridos de consideración.
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Familiares de las víctimas se han reunido a las puertas de dicho centro, acompañados de otros ciudadanos, quienes claman por la salud de las víctimas en una vigilia.
Serbia conmocionada
La detención del atacante coincide con el inicio de los tres días de luto decretados por el gobierno tras la masacre ocurrida en una escuela de primaria de Belgrado.
Además de las nueve víctimas mortales, seis alumnos y una profesora resultaron heridos. Dos de ellos se encuentran en situación crítica tras someterse a varias operaciones, según autoridades médicas.
El atacante fue detenido poco después de la matanza en el recinto de la escuela, donde esperaba la llegada de los policías, e ingresó en un hospital psiquiátrico.
Su padre, un reputado médico y propietario del arma usada, fue arrestado y debe declarar este viernes ante la justicia. La madre también fue interrogada.
La violencia armada en las escuelas es extremadamente inusual en Serbia, un país de siete millones de habitantes con alrededor de 765.000 armas registradas.
Con información de AFP
